1 de octubre de 2024 - 10:53 Por Sarai Avila La muerte de Alexéi Navalny, líder opositor ruso, ha suscitado una nueva controversia respecto a la transparencia de las autoridades del gobierno de Putin, particularmente debido a las acusaciones de manipulación de los documentos relacionados con su deceso. Navalny, quien murió en febrero de 2024 en una prisión del Ártico, fue declarado oficialmente fallecido por causas naturales. Sin embargo, una investigación realizada por el medio independiente ruso “The Insider” ha revelado que detalles cruciales sobre su muerte fueron eliminados de los informes oficiales, sugiriendo un posible encubrimiento del verdadero motivo de su fallecimiento.
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El gobierno de Putin no sabe cómo esplicar la muerte del líder opositor Navalny
La investigación
Según “The Insider”, los documentos originales describen que Navalny presentó un "fuerte deterioro de salud" mientras se encontraba en el patio de la prisión, quejándose de un dolor abdominal agudo, vómitos y convulsiones. Estos síntomas, según el doctor Alexander Polupan, quien trató a Navalny tras un intento de envenenamiento con Novichok en 2020, son consistentes con una nueva exposición a un agente nervioso. Polupan afirmó que los síntomas no pueden explicarse por "una simple arritmia", como señalaron las autoridades, quienes finalmente declararon que la causa de muerte fue un "trastorno cardíaco".
La investigación también detalla que las autoridades eliminaron cualquier mención de estos síntomas en versiones posteriores de los documentos entregados a la viuda de Navalny, Yulia Navalnaya, quien ha denunciado repetidamente el encubrimiento del asesinato de su esposo. Según ella, las autoridades no permitieron a la familia obtener el cuerpo de Navalny inmediatamente después de su muerte, lo que despertó sospechas adicionales sobre la manipulación de la causa oficial de la muerte.
El medio de investigación reveló además que había evidencia documental de que se habían recolectado "muestras de vómito" para su análisis, pero este dato fue omitido en las versiones oficiales. Esto, sumado a la falta de imágenes de las cámaras de seguridad en la prisión donde ocurrió el incidente, refuerza la teoría de un envenenamiento que fue encubierto por el Estado ruso.
La voz de la viuda de Navalny
La viuda de Navalny, Yulia Navalnaya, ha sido una de las voces más críticas sobre la versión oficial, calificando el diagnóstico de arritmia como un "intento patético" de encubrir un asesinato. En su blog personal, señaló que "Alexéi no fue llevado a la unidad médica, sino a una celda de castigo, donde murió solo".
Estas revelaciones han reavivado las tensiones entre el Kremlin y los defensores de los derechos humanos en Rusia y a nivel internacional. La manipulación de los documentos relacionados con la muerte de Navalny y las inconsistencias en la narrativa oficial plantean serias dudas sobre la verdadera naturaleza de los eventos que llevaron a su muerte, y el caso continúa siendo objeto de investigación por medios independientes y organismos internacionales.
