27 de septiembre de 2024 - 11:22 Por Sarai Avila La Asamblea General de las Naciones Unidas (ONU) es uno de los eventos diplomáticos más relevantes del año, y este 2024 no es la excepción. Líderes de todo el mundo se han dado cita en Nueva York para discutir temas clave que abarcan desde el cambio climático hasta los conflictos en Oriente Medio. La 79.ª sesión de la Asamblea General ha sido un escenario de discursos trascendentales, con la destacada participación de presidentes como Joe Biden y Javier Milei, y notables ausencias como las de Vladimir Putin, Xi Jinping y Nicolás Maduro.
¿Qué es la Asamblea General de la ONU?
La Asamblea General de la ONU es uno de los seis principales órganos de las Naciones Unidas, y en su seno se reúnen los representantes de los 193 Estados miembros. Este organismo, que sesiona de manera permanente, tiene entre sus funciones principales discutir y aprobar resoluciones sobre una vasta gama de temas internacionales como la paz, el desarrollo, los derechos humanos, y la seguridad internacional. A diferencia del Consejo de Seguridad, donde solo cinco países tienen poder de veto, la Asamblea General es un foro más inclusivo, donde cada país tiene un voto.
El Debate General es el punto culminante de la Semana de Alto Nivel de la Asamblea. Es en este espacio donde los líderes mundiales tienen la oportunidad de dirigirse a la comunidad internacional y exponer sus puntos de vista sobre los principales retos globales. El tema de este año ha sido "No dejar a nadie atrás: Actuar juntos para promover la paz, el desarrollo sostenible y la dignidad humana". Aunque se espera que los discursos se centren en esta agenda, los presidentes suelen aprovechar la oportunidad para destacar temas internos y estratégicos de sus propios países.
Joe Biden: Un llamado a la unidad y a la cooperación global
En su último discurso ante la Asamblea General, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, hizo un llamado a la unidad global. A sus 81 años, Biden reconoció los desafíos actuales, desde los conflictos en Gaza y Ucrania hasta la amenaza del cambio climático y la inteligencia artificial. Subrayó la importancia de mantener la paz y la cooperación internacional, especialmente en un momento en que el mundo enfrenta graves divisiones.
El mandatario estadounidense hizo un fuerte énfasis en la guerra de Ucrania, reafirmando el compromiso de su país y de sus aliados occidentales en apoyar a Kiev hasta que Rusia, liderada por Vladimir Putin, ponga fin a su invasión. “No podemos cansarnos. No podemos apartar la mirada”, aseguró Biden. También destacó que la guerra en Oriente Medio sigue siendo un foco de preocupación, instando a una solución diplomática entre Israel y Hamás.
En el ámbito de la inteligencia artificial, Biden alertó sobre los riesgos que plantea esta tecnología, especialmente si es utilizada con fines represivos por regímenes totalitarios. Subrayó la necesidad de establecer normas globales para garantizar que la inteligencia artificial se utilice para el beneficio de la humanidad y no como un instrumento de control.
Javier Milei: Un ataque al multilateralismo
El presidente de Argentina, Javier Milei, tuvo una intervención que sacudió a la comunidad internacional. En su primer discurso ante la ONU, Milei criticó duramente la Agenda 2030 y el Pacto del Futuro, clasificándolos de "programas de gobierno supranacional de corte socialista". Para Milei, la ONU ha perdido de vista sus principios fundacionales y se ha convertido en un "leviatán de múltiples tentáculos" que busca imponer una agenda ideológica global.
Milei no solo anunció que Argentina no participará del Pacto del Futuro, sino que también se distanció de la Agenda 2030, que busca promover el desarrollo sostenible, la igualdad de género, y la lucha contra el cambio climático. Su discurso fue uno de los más polémicos, ya que lo posiciona como un líder global de la ultraderecha que pretende desmantelar el multilateralismo y poner fin a la injerencia de organismos internacionales en asuntos internos de los países.
Lo que se está discutiendo aquí no es otra cosa que la profundización de ese rumbo trágico que esta institución ha adoptado”, afirmó el mandatario argentino. Con estas palabras, Milei dejó claro que su gobierno promoverá una agenda de libertad que, a su juicio, es la única solución para el desarrollo de los países.
Las ausencias notables
Este año, las ausencias de tres importantes líderes mundiales han marcado la Asamblea: Vladimir Putin (Rusia), Xi Jinping (China) y Nicolás Maduro (Venezuela). Vladimir Putin no asistió, como se esperaba, debido a la orden de arresto internacional emitida por la Corte Penal Internacional (CPI) por crímenes de guerra relacionados con la invasión a Ucrania. La situación de Putin lo ha obligado a limitar sus viajes al extranjero, restringiéndolos a países “amigos”, donde no corre el riesgo de ser detenido.
Xi Jinping también decidió no acudir a la Asamblea, enviando en su lugar al ministro de Relaciones Exteriores, Wang Yi. Este patrón se ha repetido en varias ocasiones, reflejando la política china de mantener un perfil más bajo en la Asamblea General y priorizar otras plataformas internacionales donde ejerce mayor influencia. Por último, Nicolas Maduro no asistió debido a la polémica que rodea su reelección en las elecciones del 28 de julio, que ha sido rechazada por gran parte de la comunidad internacional, podría ser una de las razones de su ausencia. A menudo, el mandatario venezolano prefiere evitar el escrutinio internacional en eventos como la Asamblea General de la ONU.
Desafíos y propuestas para el futuro
En medio de los discursos de líderes mundiales y las tensiones globales, la Asamblea General 2024 también ha servido como escenario para la adopción del Pacto del Futuro, un documento que propone reformas clave en el sistema internacional para enfrentar los desafíos del siglo XXI. Este pacto fue aprobado por la mayoría de los miembros de la ONU, aunque Argentina, bajo el liderazgo de Milei, ha optado por no adherirse. El Pacto del Futuro busca enfrentar amenazas como el cambio climático, la escalada de conflictos, y el aumento de la desigualdad, al tiempo que propone reformar la estructura del Consejo de Seguridad para hacerlo más representativo y equitativo. Además, se incluyen compromisos para regular el uso de la inteligencia artificial y prevenir una carrera armamentista en el espacio exterior.