1 de junio de 2023 - 12:15 Por Sarai Avila El domingo 28 de mayo se realizó la segunda vuelta electoral en Turquía. El mandatario Recep Tayyip Erdogan, fundador del Partido de la Justicia y el Desarrollo (AKP), fue reelegido Presidente del país. Logró obtener el 52,1% de los votos en contraposición al 47,9% del candidato opositor, Kemal Kilicdaroglu. En su discurso post victoria electoral, Erdogan declaró: “Del mismo modo que hemos sido leales durante 20 años, lo seremos durante cinco años más". De esta forma se convierte en la persona que más tiempo ha permanecido al mando de la República luego de su fundador Mustafá Kemal Atatürk.
Erdogan es Presidente desde agosto de 2014. Anterior había sido Primer Ministro y Alcalde. Ha participado en 14 elecciones: seis legislativas, tres referendos, tres locales y dos votos presidenciales. No ha perdido ninguna. Se describe a sí mismo como islamita, demócrata y conservador, defensor de la política liberal.
La primera vuelta electoral fue el 14 de mayo. Erdogan sacó el 49,5% de los votos. Por su parte Kilicdaroglu obtuvo el 44,9%. El sistema electoral de Turkiye establece que el candidato debe obtener una mayoría absoluta o más del 50% de los votos a nivel nacional. Si ningún candidato puede obtener la mayoría, el ganador se decide en una segunda vuelta entre los dos candidatos más votados en la primera vuelta. Es un sistema de representación mixto y proporcional de votación por mayoría, lo que permite que el número de escaños de un grupo o partido en un órgano legislativo sea determinado por el número de votos recibidos.
En 2017, tras una enmienda constitucional, Turquía pasó de un sistema parlamentario a uno presidencialista. Se suprimió el cargo de Primer Ministro, quien pasó a ser el Speaker de la Gran Asamblea Nacional, y el principio de naturalidad. Como consecuencia, la democracia se ha deteriorado según los indicadores que la miden. La oposición busca volver al sistema parlamentario o al menos a un sistema semi-presidencialista.
Durante las elecciones han habido quejas y denuncias por irregularidades. Por ejemplo, que se han realizado votos con nombres de personas que no estaban empadronadas, registro de personas fallecidas, entrega de boletas pre-selladas y entrega de dinero a votantes por parte de Erdogan, cosa prohibida por la ley. Durante el día, en algunos colegios electorales hubo peleas, agresiones físicas e intervención de las FFAA. Sin embargo, el Presidente del Consejo Supremo Electoral, Ahmet Yener, afirmó que “no ha habido ninguna situación negativa que se haya reflejado en nuestro consejo y que haya afectado al proceso de votación”.
La situación actual de Erdogan se ve atravesada por diferentes variables. La inflación desenfrenada y la respuesta débil y escasa frente al terremoto de febrero fueron dos de los temas esenciales durante la campaña. A su vez, el mandatario ha sido acusado de alterar las instituciones, de aliarse con la organización xenófoba de extrema derecha Lobos Grises, de tomar medidas contra las mujeres y grupos minoritarios, y de controlar los medios de comunicación, reprimiendo libertades y campañas de la oposición. A esto se suma el papel del Presidente como actor central en la guerra ruso-ucraniana, ya que ha apoyado a Ucrania con armamento, drones y temas de seguridad, y a Rusia con exportaciones, energía y comercio. También ha impedido que Suecia y Finlandia se unan a la OTAN, aunque luego accedió al ingreso de Finlandia.
Otro tema de discusión ha sido el grupo Kurdo y las acusaciones terroristas. Los Kurdos son un grupo minoritario, que ocupa el 20% de la población turca. Su líder Selahattin Demirtas (HDP) fue candidato a presidente en 2014, y logró obtener el tercer lugar. En 2016 fue arrestado luego de una represión masiva contra los opositores y críticos luego de un intento fallido de Golpe de Estado. El Tribunal Europeo de Derechos Humanos ha pedido su liberación, pero Demirtas continúa en prisión. En las elecciones del corriente año, el Partido de la Izquierda Verde ha sido el nombre bajo el cual los candidatos del HDP y la Alianza trabajo y Libertad, partidos pro-kurdo, se presentaron a las elecciones.
Erdogan acusó a la oposición de estar relacionada con el terrorismo y de apoyar a la comunidad LGTBIQ+. Estas acusaciones son fundamentales debido a que son dos de los principales temas que caracterizaron la campaña y el discurso del Presidente turco. Por su parte, Kilicdaroglu criticó la forma de gobierno actual y afirmó luego de admitir su derrota electoral que seguirá luchando “por la democracia real” y restaurar los derechos humanos.
La comunidad internacional ha felicitado al Presidente por ganar la reelección. Joe Biden, Vladimir Putin, Rishi Sunak, representantes de las Naciones Unidas, Luiz Lula da Silva, Giorgia Meloni, Nicolas Maduro han sido algunos de los muchos líderes que han felicitado al candidato del AKP. El Presidente Alberto Fernández también ha saludado a su homólogo.