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SUSCRIBITELos secretos del caso de Jeffrey Epstein, plagado de abusos sexuales y corrupción, sigue sorprendiendo al mundo entero.
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SUSCRIBITEEl caso de Jeffrey Epstein ha sacudido al mundo, revelando una red de abusos y corrupción que involucra a figuras prominentes de la sociedad. No solo la sociedad estadounidense se sigue conmoviendo con los hallazgos, sino que el mundo entero asiste perplejo al relato de historias que involucran a figuras relevantes de varios países.
Este informe tiene como objetivo proporcionar una visión detallada y estructurada de los aspectos más relevantes de este escándalo: la vida y carrera de Epstein, las acusaciones y juicios que enfrentó, la implicación de su asociada cercana, Ghislaine Maxwell, y las conexiones con políticos y figuras públicas.
Jeffrey Edward Epstein, nacido el 20 de enero de 1953 en Brooklyn, fue un magnate financiero y delincuente sexual estadounidense. A pesar de no completar sus estudios universitarios, Epstein logró abrirse paso hasta la cumbre del mundo financiero a base de mentiras y manipulación. En septiembre de 1974, comenzó a trabajar como profesor de física y matemáticas en la Dalton School en Manhattan, a pesar de no contar con las credenciales necesarias. Fue en esta escuela donde conoció a Alan Greenberg, director ejecutivo de Bear Stearns, quien le ofreció un trabajo en el banco de inversión en 1976. Epstein rápidamente ascendió en Bear Stearns, convirtiéndose en socio comanditario en 1980. Sin embargo, en 1981 fue despedido, aunque siguió manteniendo relaciones cercanas con altos ejecutivos de la firma.
En 1981, Epstein fundó Intercontinental Assets Group Inc., una empresa de consultoría que ayudaba a recuperar dinero de clientes fraudulentos. En 1988, fundó J. Epstein & Co., que administraba los activos de clientes multimillonarios. Uno de sus clientes más notables fue Leslie Wexner, presidente y director ejecutivo de Limited Brands, quien le otorgó a Epstein pleno poder notarial sobre sus asuntos en 1991. Durante la década de 1980 y principios de los 90, Epstein también afirmó trabajar como consultor para gobiernos y personas adineradas. Además, poseía un pasaporte austriaco con un nombre falso, sugiriendo una vida envuelta en misterio y posibles actividades ilegales.
Las primeras denuncias de abuso sexual contra Epstein surgieron en los años noventa en Estados Unidos, pero gracias a sus influencias logró evadir problemas legales en varias ocasiones. En 2005, la policía de Palm Beach, Florida, comenzó a investigarlo tras la denuncia de un padre que lo acusaba de acosar a su hija de catorce años. En 2008, Epstein se declaró culpable de solicitar prostitución y tentar a la prostitución a menores, siendo condenado a 18 meses de cárcel, de los cuales cumplió 13 en un ala privada del Palm Beach County Stockade, bajo un acuerdo que ha sido ampliamente criticado por su indulgencia.
Jeffrey Epstein instaló cámaras ocultas en sus propiedades, incluyendo su isla privada en las Islas Vírgenes de EE. UU. y su mansión en Nueva York, con el presunto propósito de grabar actividades sexuales ilícitas, incluyendo abusos a menores, perpetrados por personas prominentes. Ghislaine Maxwell, asociada cercana de Epstein, mencionó que la isla estaba completamente cableada para video, y se cree que estas grabaciones podrían haber sido utilizadas para chantajear a los visitantes. Además, testimonios como el de Maria Farmer, una ex empleada de Epstein, sugieren la existencia de una sala de monitoreo en la mansión de Nueva York, donde se vigilaban las actividades captadas por las cámaras estenopeicas.
En julio de 2019, Epstein fue arrestado nuevamente y acusado de tráfico sexual de menores por la Fiscalía Federal del Distrito Sur de Nueva York. Las acusaciones afirmaban que había explotado sexualmente y abusado de numerosas niñas menores entre 2002 y 2005. Se enfrentaba a una condena potencial de hasta 45 años de cárcel si era declarado culpable. Sin embargo, el juicio por estos nuevos cargos no se llevó a cabo debido a su muerte el 10 de agosto de 2019.
Las investigaciones policiales y judiciales revelaron la extensión de los crímenes de Epstein, incluyendo testimonios de presuntas víctimas y testigos, así como evidencia física como cámaras ocultas y material inculpatorio encontrado en sus propiedades. Además, se identificaron colaboradores clave en sus actividades delictivas, incluyendo a Ghislaine Maxwell y otros cómplices que facilitaban sus acciones.
Ghislaine Maxwell nació el 25 de diciembre de 1961 en Maisons-Laffitte, una localidad en las afueras de París, Francia. Ella era la hija más joven de Robert Maxwell, un magnate de los medios de comunicación, y su esposa Elisabeth Maxwell. Su padre era conocido por ser un editor de periódicos y un empresario prominente en el Reino Unido, propietario de empresas de medios como Mirror Group Newspapers. La familia Maxwell era influyente en círculos políticos y empresariales, y Ghislaine creció en un entorno de privilegio y riqueza. Después de la muerte de su padre en 1991, Ghislaine se mudó a los Estados Unidos, donde eventualmente conoció a Jeffrey Epstein.
En los testimonios de las víctimas, se describió a Maxwell como la gerente de la casa de Epstein y como su ex novia, supervisando al personal y manejando las finanzas. Entre 1994 y 1997, fue acusada de estar íntimamente involucrada en el tráfico sexual de menores, mientras ella y Epstein socializaban con figuras prominentes.
Después del arresto y proceso legal de Epstein en 2008, Maxwell comenzó a distanciarse de él. Sin embargo, documentos judiciales de 2009 la señalaron como facilitadora de los crímenes de Epstein. En diciembre de 2012, Maxwell fue declarada culpable de cinco de los seis cargos en su contra, incluido el tráfico sexual de menores. Las acusaciones incluyeron actividades que ocurrieron entre 1994 y 2004, implicando abusos sexuales en varias propiedades de Epstein. Además de los cargos relacionados con la explotación sexual, Maxwell también fue acusada de perjurio.
En 2020, Maxwell fue arrestada por el FBI en New Hampshire por delitos relacionados con el tráfico de menores y Epstein. Maxwell enfrenta una sentencia de hasta 20 años de cárcel por su papel en los delitos de tráfico sexual. Varios testimonios durante el juicio describieron a Maxwell como una figura central en la operación de tráfico sexual de menores de Epstein. A pesar de su condena, Maxwell expresó arrepentimiento por haber conocido a Epstein y lamentó el dolor infligido a las víctimas.
Después de que el 3 de enero del 2024 se hicieran públicos cientos de documentos judiciales sellados relacionados con su caso y salieran a la luz los nombres de prominentes figuras vinculadas a él, Loretta Preska, jueza encargada del caso, estaría autorizada a levantar el secreto de sumario y hacer públicos los 177 nombres o pseudónimos que figuran en estos listados de personalidades involucradas con los crímenes.
La lista de Epstein no es en realidad una lista. Al menos, no una lista de clientes, ni de quienes viajaron a su isla. Aunque hay algunas enumeraciones de nombres, en la mayoría de los casos las personas aparecen mencionadas en los documentos en contextos heterogéneos. Junto a personas que cometieron actos sexuales con algunas de las víctimas, hay otras que aparecen solo de forma tangencial, porque se pregunta por ellas o porque son víctimas, o empleados. En la inmensa mayoría de los casos, no hay indicios de conductas reprobables, aunque la mera aparición de un nombre se haya mostrado tóxica para su reputación, en medio de la desinformación que circula sin freno por las redes sociales, donde también han aparecido numerosas listas falsas.
Entre las figuras mencionadas en los documentos aparecían Stephen Hawking (científico), Papa Juan Pablo II, Michael Jackson (Músico), David Copperfield (Mago), Leonardo DiCaprio (Actor), Bruce Willis (Actor), Cameron Diaz (Actriz), Cate Blanchett (Actriz y modelo), Naomi Campbell (Modelo), George Lucas (Director de cine), Kevin Spacey (actor), Oprah Winfrey (Figura de la TV), Alexandra Cousteau (Cineasta), Chris Tucker (Actor), Bill Clinton (expresidente de Estados Unidos), Donald Trump (empresario y expresidente de Estados Unidos), Príncipe Andrés (Hermano del rey Carlos III de Reino Unido).
Las reacciones de los actores políticos implicados fueron: el Príncipe Andrés emitió un comunicado negando cualquier conducta inapropiada. Sin embargo, después de una entrevista televisiva en la que trató de abordar las acusaciones en su contra, se enfrentó a una reacción negativa por parte del público y los medios de comunicación debido a sus respuestas consideradas evasivas y poco convincentes. Posteriormente, el príncipe se retiró de los deberes reales y de la vida pública.
Por su parte, Donald Trump ha minimizado su relación con Epstein, afirmando que él y Epstein se distanciaron después de un desacuerdo comercial hace años. Sin embargo, después de la muerte de Epstein, Trump fue criticado por sus comentarios especulativos sobre la causa de la muerte de Epstein y su relación con Bill Clinton, quien emitió un comunicado negando cualquier conducta inapropiada y afirmando que solo había tomado vuelos en el avión de Epstein en cuatro ocasiones. Sin embargo, su relación con Epstein ha sido objeto de escrutinio y especulación, especialmente debido a la frecuencia de sus viajes en el avión de Epstein y su presencia en eventos relacionados con Epstein.
La Isla Little Saint James era propiedad de Epstein. Sin embargo, la Isla es mayormente conocida con nombres como “La isla de la pedofilia”, “Isla pederasta de la Élite” y “Isla de las Lolitas”. En este lugar, Epstein y Maxwell llevaban niñas y adolescentes que sufrieron abusos sexuales no solo por la pareja sino también por los amigos e invitados de estos, que accedían a Little St. James mediante el uso del avión privado de Epstein, conocido como "Lolita Express".
Según la demanda presentada por la fiscal general Denise N. Georg, Epstein creó una red de empresas e individuos que participaron y conspiraron con él en un patrón de actividad criminal relacionada con el tráfico sexual, el trabajo forzado, la agresión sexual, el abuso infantil y la servidumbre sexual de estas mujeres jóvenes y niñas".
Tras llegar a un acuerdo, en mayo de 2023, el multimillonario jefe de capital privado Stephen Deckoff adquirió ambas islas por menos de la mitad del precio original, pagando USD 60 millones. Deckoff, fundador de la empresa de capital Black Diamond Capital Management y residente en las Islas Vírgenes durante más de una década, está llevando a cabo un ambicioso proyecto: la construcción de un complejo turístico de lujo de cinco estrellas con 25 habitaciones en estas islas. Este proyecto tiene como objetivo transformar el oscuro legado de las islas en un destino turístico de alto nivel. Sin embargo, antes de esta transacción, las islas fueron objeto de una batalla legal entre las Islas Vírgenes estadounidenses y el albacea del patrimonio de Epstein, lo que complicó inicialmente el proceso de venta y renovación.
La noche del 9 al 10 de agosto de 2019, los guardias Michael Thomas y Tova Noel tuvieron una noche tranquila en su turno en el Centro Correccional Metropolitano de Nueva York, donde Jeffrey Epstein estaba detenido. Sin embargo, descubrieron por la mañana que Epstein se había suicidado ahorcándose con una sábana atada a las rejas de la ventana de su celda. Epstein, de 66 años, había sido detenido por tráfico sexual de menores y enfrentaba una posible condena de 45 años.
Epstein había mostrado signos de desequilibrio desde su detención y había intentado suicidarse anteriormente. Estaba bajo vigilancia constante, pero la noche de su suicidio, los guardias Thomas y Noel no cumplieron con su deber de controlar su celda cada 30 minutos, como se les había ordenado. Además, Epstein había quedado solo en su celda cuando su compañero de celda fue trasladado y las cámaras de vigilancia no estaban funcionando.
Las fallas en la custodia de Epstein permitieron que se suicidara, lo que generó teorías conspirativas sobre su muerte. Las autoridades identificaron una serie de errores, incluida la falta de asignación de un compañero de celda y la falta de vigilancia adecuada, que crearon las condiciones para que Epstein se quitara la vida.
El juicio relacionado con el caso de Jeffrey Epstein ha seguido adelante después de su muerte, centrándose en la persecución de otros implicados y en la búsqueda de justicia para las víctimas. Las autoridades continúan investigando y procesando a personas vinculadas a la red de tráfico sexual de menores asociada con Epstein. Además, se están llevando a cabo investigaciones sobre posibles cómplices y facilitadores de los delitos cometidos por Epstein. Las víctimas también están buscando reparación a través de demandas civiles contra el patrimonio de Epstein y otras partes involucradas.